En mi opinión, la idea es buena y necesaria en este momento y lugar. Pero la realización del proyecto urbanístico se queda fuera de escala y no soluciona el terreno antiguo lleno de bucles y viales. Las espirales que concentran los edificios y plazas son muy literales y hacen que el peatón se pierda entre calles y edificios altos.
En Madrid, como plan urbanístico que aúne la actividad financiera y residencial está el "Manhattan madrileño", es decir, el plan de prolongación de la Castellana y construcción de AZCA de los años 1940 cuyo objetivo principal era crear una nueva fachada imperial de Madrid. Trataba temas como los accesos a la capital y el anillo verde que rodearía el conjunto urbano y pretendía prolongar la Castellana como un nuevo ensanche residencial y a su vez reafirmar AZCA como zona comercial y financiera llena de oficinas y rascacielos que ayudaría a la descongestión del centro urbano.