dijous, 2 de juny del 2011

Municipios convertidos en barrios

La ultima visita llevada a cabo por Barcelona nos llevó hasta el barrio de Gràcia. Antiguamente, un municipio independiente de Barcelona y que poseía su propio ayuntamiento, su propia trama urbana, etc. El crecimiento de Barcelona a principios de 1900 llevó a la ciudad a anexionar todos estos municipios próximos a la gran urbe: Gràcia, Sants, Les Corts, Sant Andreu...
La diferenciación de Gràcia con el resto de Barcelona se debe a la parcelación propia del barrio, principalmente de edificaciones de 6 metros de ancho; y la existencia de plazas sobre las que se vuelca el vecindario.
En Zaragoza, no existe un barrio como tal tan parecido a Gràcia, por la sencilla razón de que no ha existido en la ciudad una anexión de municipios importante como en su momento ocurrió en Barcelona. A pesar de ello, se conserva algún reducto propio de los barrios más antiguos de la ciudad. Saliéndonos del propio casco antiguo, podemos encontrar reductos como el barrio del Arrabal, barrio obrero de la ciudad situado en la margen izquierda del río Ebro; donde se han conservado las edificaciones propia de la población hechas a base de ladrillo viejo y madera. Otras barrios que guardan también su encanto anterior son El Carmen y San Pablo, aunque ya pertenecientes al casco histórico.