Creo que un parque como es el de Collserola es imprescindible junto a una ciudad como Barcelona. Para la gente a la que le gusta salir a pasear, disfrutar de los sonidos y del aire de la naturaleza, lejos del ruido y de los humos, puede resultar el lugar perfecto. Está cerca de la ciudad, bien comunicado, pero, sin embargo, no se entrega completamente a ésta. Así, quien quiere disfrutar de este lugar lo tiene fácil, y a la vez no se encontrará con un parque lleno de visitantes que puedan quitarle su encanto como lugar de descanso y reflexión.