Aunque más moderna y un poco más alta, esta torre es comparable con la Torrespaña de Madrid de los años 80, ambas suponen un hito importante en su ciudad. La principal diferencia, en mi opinión, (además de la época de construcción) es la situación de estas dos torres: el comúnmente llamado pirulí está en pleno centro de Madrid, en cambio la torre de Collserola está a las afueras de Barcelona, lo que le permite a Foster otro tipo de construcción más extensa.