Como se comentó en la visita, desde que Montjuic, con su castillo, se convirtió en el símbolo del poder que ejercía Madrid sobre Barcelona, la montaña fue vista negativamente por los Barceloneses. Todo lo que nadie quería se fue poniendo allí, el cementerio, el vertedero, etc.
Actualmente se utiliza como parque equipado y se han hecho numerosos intentos por recuperar la dignidad de la montaña y limpiar la imagen que los barceloneses tienen de Montjuic.
En Durango no hay ningún ejemplo similar al de Montjuic, quizá el más cercano es el de la ría de Bilbao. Hace 20 años la ría era un vertedero maloliente que se asociaba con los astilleros y la ciudad industrial. Los ciudadanos hacían lo posible por vivir de espaldas a la ría. Ha sido necesaria un profunda limpieza de la ría y la renovación total de sus orillas para conseguir que los bilbainos vean la zona como un lugar de ocio y un elemento distintivo de la ciudad.
