Sants es un barrio con características muy particulares que resultan de una historia privilegiada. Sants fue villa independiente de Barcelona y, antes de ser parte de la capital, era un pueblo industrial. Las cicatrices que ha dejado este pasado, hoy demuestran el crecimiento del barrio no tan solo urbanísticamente, sino también social y culturalmente.
La arteria principal del barrio es la Calle de Sants popularmente conocida como Carretera de Sants, que une la Plaza España de Barcelona con el municipio de Hospitalet de Llobregat. Esta calle proporciona un lugar privilegiado para el comercio y forma el eje comercial más largo de Europa. Sus ramificaciones son callejuelas que dan paso a una serie de viviendas fantásticamente posicionadas al rededor de la calle principal.
Sin embargo, Sants tiene un trasfondo más profundo que el relacionado con su comercio y las viviendas, y tiene que ver con las costumbres practicadas en la época textil que prevalecen hasta hoy en día. Un ejemplo de ello, es la practica de la construcción de torres humanas, a cargo del grupo Castellers de Sants, que se realiza desde las fiestas populares de los años 80.
Esta tradición que inició en Tarragona, además de ser declarada como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco, no ha recibido ninguna modificación de como se hacia hace 200 años y es una práctica que une a la gente del barrio de sants; pues para la creación del castillo intervienen amigos, familiares, aficionados y espectadores espontáneos del barrio que se unen a la colla de castellers. Es un trabajo en equipo del barrio que los unifica y es verdaderamente impresionante, jamás había visto algo parecido en país.
