dilluns, 11 d’abril del 2011

Barrios con identidad propia

Pueblo Seco, nacido a la sombra de la montaña de Montjuic, situado en donde la ciudad acaba y donde empieza el mar, siempre ha sido un barrio multicultural caracterizado por una historia que lo ha llevado a tener una personalidad propia, llena de vida, movimiento y color, que lo convierten en un barrio peculiar y valioso en Barcelona.

Como nos han explicado a lo largo de este curso, durante el siglo XVIII, la industrialización empezó a cambiar el aspecto rural del territorio barcelonés. En algunos sitios se hacía más notorio que en otros, pero definitivamente en el Barrio Seco, la implantación de la central eléctrica proporcionaba al barrio un importante progreso comercial, económico y social.

La construcción de viviendas para los trabajadores de las nuevas fábricas comenzó entonces a la par de este proceso de industrialización y, para el Barrio Seco, fue un total acierto porque, de esa manera, se comenzó la urbanización del barrio, sin mucho orden, sin normas específicas como las del plan Cerdá, pero exitoso hasta nuestros días.

Lo anterior, creo que fue la chispa precisa que transformó a un barrio industrial en un barrio mágico, artístico y llamativo. La Avenida Parelelo es un ejemplo claro de tal transformación, cuyo apodo es Broadway barcelonés, pues anima las noches del barrio, con espectáculos y eventos musicales como los del famoso Molino.

A mi parecer, Coyoacán, es un barrio que podría poseer un ambiente bastante semejante al de Pueblo Seco por la historia que tiene y por el ambiente que ofrece.

Su privilegiada situación al sur de la ciudad de México, le permitió a Coyoacán convertirse en un centro prehispánico importante a orillas del antiguo lago y tiempo después pudo alojar magníficas casas en torno a una fundación franciscana del siglo XVI.

Es por ello que su riqueza en historia es importante dentro de la cultura mexicana y recorrer el barrio es espectacular. Sus hermosas plazas, galerías de arte, restaurantes y la vida bohemia enriquecida por cafés, bares, restaurantes, librerías y las vistosas fiestas populares lo hacen atractivo y diferente a todos los barrios de la ciudad de México.

Jardín Centenario, parque de Coyoacán, México

Los coyotes de Coyoacán

El Molino, Barcelona, España.
Las tres chimeneas vistas desde parque público, Barcelona, España.